Si Mariano Rajoy quería dejar atrás el 11-M, quien le designó como sucesor, José María Aznar, no está dispuesto a ello. El expresidente del Gobierno insistió ayer en una de sus frases preferidas y que pronunció cuando compareció en la comisión de investigación del Congreso: "Lo mantengo íntegramente. Digo que los que idearon estos atentados no están ni en desiertos remotos ni en montañas lejanas", aseguró en una entrevista en Antena 3.

Aznar no se movió de los planteamientos que defendió en los días siguientes al 11-M. Incidió en su tesis de que los autores pretendían un cambio político en España y no redujo la autoría al terrorismo islamista. Afirmó que "sus conexiones, tarde o temprano se sabrán, si es que las hay".

"MIRAR AL FUTURO" Las palabras de Aznar contrastan con las de otros dirigentes del PP, que prefieren dejar atrás, de forma definitiva, los atentados del 11-M. El coordinador del programa electoral del PP, Juan Costa, íntimo del exministro Rodrigo Rato, aseguró que su partido respalda la sentencia judicial y que la línea que hay que seguir la definió Rajoy con la frase "hay que mirar al futuro".

El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quiso cerrar la polémica y pidió "unidad" al PP con la advertencia de que el aviso de Al Qaeda "es serio".