El Rey visitará el próximo lunes la zona de Galicia afectada por el desastre del Prestige . Así lo anunció ayer el presidente del Gobierno, José María Aznar, que aún no ha acudido al lugar de la catástrofe para "no mercadear políticamente con el dolor de la gente" y que ha dicho que sólo irá si se considera "útil" su presencia.

Aznar explicó que el Monarca estará acompañado en su periplo por el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, que afronta una moción de censura de los socialistas por haber "abandonado", según la oposición, a los afectados, ya que pasó uno de los días de la crisis en una finca de caza en Aranjuez (Madrid).

APOYO DE ITALIA

Aznar se refirió con amplitud al drama de las costas gallegas en rueda de prensa conjunta con su homólogo italiano, Silvio Berlusconi, tras la cumbre bilateral que celebraron en Roma. Berlusconi anunció su apoyo al acuerdo que Aznar y el presidente de Francia, Jacques Chirac, alcanzaron el martes en Málaga para expulsar de las costas de sus países los barcos en mal estado, un acuerdo al que ayer se sumó Portugal.

Hace seis días, en Praga, Aznar justificó su ausencia de la zona catastrófica con el argumento de que Rajoy y Fraga ya la habían visitado. "Pero si se considera útil mi presencia, estoy a disposición de quien es el responsable de coordinar los trabajos, que es el vicepresidente primero del Gobierno", apostilló.

El miércoles pasado, frente a las criticas de la oposición en el Congreso, el jefe del Ejecutivo afirmó: "No iremos a hacernos fotografías ni a mercadear políticamente con el dolor de la gente".

Ayer ante los periodistas, Aznar insistió en defender la gestión de su Gabinete durante la crisis e ironizó que los problemas para atajar el vertido han obedecido a "circunstancias meteorológicas que todavía no están controladas por el Gobierno".

"Lamento las inundaciones del norte de Italia, pero no me parece responsable imputar a Berlusconi que llueva en Italia", bromeó Aznar, junto a su anfitrión. Y añadió que, "del mismo modo", no se le puede responsabilizar a él por lo ocurrido con el Prestige .

A la pregunta de si se justifica la alarma creada por el desastre ecológico, dijo que "la capacidad de crear alarmas es ilimitada", que "en algunas ocasiones se puede hacer conscientemente".

El presidente hizo un minucioso repaso de todos los recursos que se han puesto en marcha para afrontar el problema. Dijo que hay ocho centros operativos y más de 800 personas en acción, que han recogido hasta ahora 2.135 toneladas de fuel. También señaló que el Congreso había avalado ayer mismo el paquete de ayudas para los afectados y dijo que 2.300 habían presentado ya la correspondiente solicitud.

Admitió que los siete buques de limpieza llevan dos días sin operar por la altura de las olas, pero afirmó que reanudarán sus tareas apenas lo permita la climatología. Por último señaló que la fragata Andalucía patrulla desde el miércoles las costas gallegas para aplicar el acuerdo con Francia para expulsar de las zonas de exclusión económica a las naves en mal estado.

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