El dirigente de Batasuna Karmelo Landa ha afirmado que la decisión del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska de dejar en libertad a Arnaldo Otegi y los otros siete dirigentes de Batasuna, incluido él mismo, supone "una perspectiva de cambio profundo en las formas, métodos y caminos para resolver el problema". En declaraciones a Radio Euskadi, Landa ha asegurado que se está ante "un cambio de ciclo" que, a su juicio, "se tiene que percibir". "Me parece importante que se perciba", ha dicho. Ha afirmado que existe una "trivialización y una falsificación de la realidad" que, en su opinión, se empieza a superar". "Estamos empezando a ver que es posible que haya un acuerdo básico y fundamental para salir de esas falsificaciones de la realidad, que jueces como Grande-Marlaska o partidos como el PP están realizando, y abordar ya lo que es un camino espero que irreversible", ha explicado. Arzalluz aprecia presiones El expresidente del EBB del PNV, Xabier Arzalluz, se ha congratulado de la decisión de Grande-Marlaska y ha afirmado que el juez "ha tenido presiones" dentro de su "trayectoria anómala" a la hora de decidir dejar en libertad a los dirigentes aberzales. Arzalluz ha explicado que, "por su trayectoria", este juez tendría que haber imputado a los ocho miembros de la mesa nacional de Batasuna a los que había citado a declarar. Arzallez, además, ha asegurado que el anuncio del líder del PSE-EE, Patxi López, de que se reunirá con Batasuna lo tenía que haber hecho el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.