Batasuna lanzó ayer un nuevo llamamiento a PNV, EA, Aralar y Ezker Batua para que le "devuelvan" los cargos que a juicio de esta formación le pertenecen aunque los perdiera como consecuencia de la ley de partidos. Opina que deben tenerse en cuenta, por "criterios democráticos", los votos nulos que recibieron las plataformas ilegalizadas.

La formación radical no explicó por qué reitera ahora un llamamiento que no ha encontrado eco en las formaciones interpeladas en las repetidas ocasiones en que han formulado su exigencia. El dirigente batasuna Pernando Barrena se limitó a expresar que consideran "que ahora es el momento de que todas las formaciones se posicionen". Como dato, señaló que hay más de 400 cargos en los ayuntamientos del País Vasco y Navarra, ocupados fundamentalmente por PNV y EA, que según su criterio, les corresponderían: "Si estas formaciones se oponen realmente a la ley de partidos, la desmontamos en 20 minutos".

INICIO DE CONTACTOS A través de una carta a los cuatro partidos mencionados, Batasuna propone el inicio de contactos para superar una situación "que sólo genera desconfianza y crispación". Apunta, además, que Euskadi es el único espacio europeo donde las instituciones "no son reflejo de la voluntad popular". Para la formación ilegalizada, esta petición se enmarca en su voluntad de generar un clima de confianza "para construir un diálogo multilateral". En la misiva se cita el caso del Ayuntamiento de Azkoitia (Guipúzcoa) como ejemplo de que "existen instrumentos que permiten solucionar este problema" dentro de la legalidad vigente.

En ese municipio, un edil de la agrupación legal Batera abandonó su cargo y, tras renunciar a ocuparlo todos sus compañeros de lista, fue designado nuevo concejal Asier Larrañaga, miembro de la plataforma ilegalizada Kimue, próxima a Batasuna.

Mientras, Unax Redondo, el joven detenido en la madrugada del miércoles por su supuesta participación en los altercados del pasado domingo a raíz de una manifestación de Batasuna en San Sebastián, fue puesto en libertad con cargos. Deberá firmar en el juzgado una vez por semana, como otros cuatro detenidos por los mismos incidentes, mientras que otros todavía permanecen en prisión.