Rotundo, el PSOE replicó ayer a ETA y a Batasuna que los "encapuchados" no marcan las reglas de juego de la democracia. Que su capacidad para "imponer condiciones" al Estado de derecho es nula. Y que la izquierda aberzale debe desprenderse del "paraguas de ETA" y optar entre "las bombas o los votos", es decir, entre seguir "amparando y amparándose" en los terroristas o cumplir la ley de partidos y participar en las próximas municipales. Así los señaló José Blanco, número dos del PSOE, tras la reunión de la ejecutiva, en la que los socialistas analizaron su estrategia electoral para este próximo mes y medio.

José Luis Rodríguez Zapatero presidió esta primera reunión de la cúpula de su partido tras las vacaciones de Semana Santa. Evitó referirse específicamente a la entrevista con la banda terrorista que publicó Gara el domingo, pero sí comentó con la dirección del PSOE las posibilidades electorales de la izquierda aberzale, que continúan circunscritas, dijo, al cumplimiento estricto de la ley de partidos. El presidente aseguró que su Gobierno ejercerá con "firmeza y determinación" su obligación de "hacer cumplir la ley" a cuantas formaciones aspiren a concurrir.

A lo que dedicó más tiempo Zapatero fue a animar a los suyos a aparcar el debate terrorista y centrar la campaña en proponer soluciones para las preocupaciones más inmediatas de los ciudadanos, que en la última encuesta del CIS sitúan el terrorismo como el séptimo de los problemas que les afectan. El sigue su propia recomendación y en sus últimos actos públicos habla solo de medidas de carácter social que su Gobierno ha puesto en marcha para mejorar la vida de los ciudadanos.

GRAN OBSTACULO DEL PP El empeño del presidente por restar protagonismo informativo al terrorismo etarra y su entorno político encuentra un gran obstáculo en el Partido Popular, que ayer continuó reclamando al Ejecutivo del PSOE más rigor contra la izquierda aberzale. Según el secretario general de los conservadores, Angel Acebes, Zapatero está incumpliendo la ley de partidos al no instar de inmediato la ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV).

Acebes sostiene que hay pruebas suficientes "y clarísimas" para ilegalizarlo tras la desarticulación del comando Donosti , ya que uno de los detenidos trabajaba para el citado partido, aseguró. Según fuentes del PP, este partido dedicará ingentes esfuerzos parlamentarios antes de las municipales a reclamar al Gobierno esa ilegalización.