El presidente valenciano, Francisco Camps, auguró ayer que, tras el éxito en Galicia, su partido protagonizará un "cambio de ciclo político". No dijo ni nada sobre la corrupción.

El triunfador gallego, Alberto Núñez Feijóo, garantizó a su partido que bajará los impuestos y cambiará las reglas del voto emigrante. Por su parte, el candidato vasco, Antonio Basagoiti, se comprometió a un crecimiento del PP "sólido y con calma" en Euskadi.