Los dirigentes del PP ya no están solos alertando de que el nuevo Estatuto catalán "rompe España". Un apocalíptico Josep Lluís Carod-Rovira advirtió de que el proyecto, si no sufre modificaciones al alza en su trámite en el Senado, pone en "peligro la integridad del Estado" porque, tal como salió del Congreso, ha generado una "evidente insatisfacción" en la sociedad catalana. El líder de ERC formuló este aviso durante la sesión constitutiva de la comisión mixta Senado-Parlamento catalán que, previsiblemente sin tocar una coma, dará luz verde a la nueva Carta autonómica.
El Estatuto en trámite, alertó, está creando "insatisfacción" en Cataluña, por lo que, no por los excesos que observa el PP, sino por todo lo contrario, puede poner en peligro la integridad territorial de España. A mayor insatisfacción, más independentismo, vino a decir.
Por su parte, el presidente del PP catalán, Josep Piqué, con un discurso de más de una hora en la ponencia, impidió que ésta acabara ayer mismo los trabajos, como querían los otros grupos. La ponencia sólo pudo discutir (y rechazar) el veto presentado por los populares, que volverá a votarse la semana que viene en comisión.
