El vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, ha admitido que la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut (TC) ha causado "una posible brecha en el conjunto de la sociedad catalana", y ha asegurado que la voluntad del Ejecutivo es cerrarla.

Tras reunirse con el presidente de la Generalitat, José Montilla, para tratar el despliegue de la norma tras el fallo, ha considerado que "no hay nada irrecuperable" en la relaciones entre el Ejecutivo central y el Govern, ni en las relaciones de Cataluña con las otras comunidades autónomas, y ha pedido "voluntad política por todas las partes".

Chaves ha precisado que en el encuentro con Montilla se ha desarrollado en "un ambiente de comprensión mutua", por lo que se ha mostrado optimista que las relaciones vuelvan a ser como antes de la sentencia del TC.

La Generalitat había definido la reunión como una "primera toma de contacto" con quien ha designado el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, para intensificar el diálogo con el Govern y mejorar el clima después de la sentencia.