El potente coche-bomba que la banda terrorista ETA ha hecho estallar hoy en un aparcamiento de la Universidad de Navarra, causando heridas leves a 21 personas e importantes daños materiales, fue robado anoche en la localidad guipuzcoana de Zumaia.Así lo ha confirmado en rueda de prensa el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien ha advertido de que la explosión podía haber causado "una enorme tragedia" en la Universidad, ya que la persona que avisó de su colocación en nombre de ETA no especificó en qué campus universitario estaba el coche.

Una hora antes de la explosión, una llamada a la DYA de Álava alertaba de la colocación del coche-bomba en el "campus de la Universidad", por lo que los agentes de la Ertzaintza inspeccionaron la Universidad de Vitoria y, al no localizar el vehículo descrito, levantaron el dispositivo. "Es evidente que quien puso la bomba avisó y, o bien sencillamente no avisó del todo intencionadamente, o bien se equivocó. A los efectos de lo que voy a decir da lo mismo, porque el resultado es que podíamos haber tenido hoy una tragedia enorme en la Universidad de Navarra, una tragedia enorme que no se ha producido", ha subrayado Pérez Rubalcaba.

El vehículo, un Peugeot 306 de color blanco, fue robado anoche en Zumaia y su sustracción fue denunciada horas después en la vecina Zarautz. En ese tiempo, apenas doce horas, los terroristas cargaron el coche con una cantidad aún no determinada de material explosivo, que ha causado graves desperfectos en una veintena de vehículos y el incendio de algunas dependencias del edificio central de la Universidad de Navarra.

La explosión, el quinto atentado que sufre esta universidad desde 1979, se ha registrado en un aparcamiento situado junto al edificio Central y a pocos metros de la Biblioteca de Humanidades, un lugar de uso habitual tanto de estudiantes como de docentes y otro personal del campus. Tras el estallido, que ha generado una columna de humo que ha podido verse en muchos puntos de Pamplona, se han vivido momentos de desconcierto y tensión entre los cientos de alumnos y profesores que, a esa hora, ocupaban la universidad, desalojada como medida de prevención.

El atentado se produce sólo 48 horas después de que la Policía diera por desarticulado el reconstituido 'comando Navarra' de ETA y detuviera a cuatro presuntos terroristas, tres en la Comunidad Foral y otro más en Valencia. Ya el martes, el ministro del Interior alertó de que este nuevo comando estaba "preparado para atentar" ya que disponía de casi 100 kilos de material para fabricar explosivos, revólveres, munición, temporizadores, varias fiambreras y abundante material informático.

Rubalcaba ha eludido hacer especulaciones sobre si el atentado de hoy en Pamplona es una "reacción" de ETA a las detenciones del martes. "Es una especulación legítima. Puede ser, puede no ser. Yo no voy a entrar en eso. No comento nunca las intenciones de ETA, pertenece al ámbito del trabajo operativo de las Fuerzas de Seguridad del Estado", ha dicho.

Además, el titular de Interior ha dejado claro que más allá de las intenciones que pueda tener ETA, el Ministerio del Interior va a continuar trabajando para detener y encarcelar a los autores de este atentado. "Nosotros vamos a seguir a lo nuestro. Por tanto, quienes han puesto este coche bomba también, como los que detuvimos el lunes, acabarán frente al juez y en prisión", ha subrayado.

La Universidad de Navarra ha sufrido cinco atentados terroristas desde 1979, uno de los cuales tuvo lugar en el mismo punto que el de hoy, la parte trasera del edificio central de esta institución. En ese mismo aparcamiento, ETA colocó el 23 de mayo de 2002 un coche-bomba, causando heridas leves a tres personas y daños materiales de importancia.