El comisario jefe de Policía de Alcalá de Henares, Eduardo Blanco, ha asegurado que durante la inspección realizada en esa localidad a la furgoneta utilizada en el 11-M no se buscaron ni encontraron los detonadores ni la cinta de casete y ha agregado que la hipótesis inicial de trabajo era la autoría de ETA.Blanco, en su comparecencia ante la comisión que investiga los atentados del 11 de marzo, ha asegurado que la única inspección que se hizo de la furgoneta utilizada por los terroristas el 11-M fue la relativa a la búsqueda de explosivos y ha agregado que posteriormente se precintó el vehículo para evitar que se borrasen las huellas.El comisario ha aclarado que en Alcalá sólo entró en la furgoneta el agente que acompañaba al perro que buscó los explosivos y ha recalcado que la tesis con la que empezaron a trabajar era que ETA había cometido los atentados.