La comisión de investigación de la masacre del 11-M inicia sus trabajos con pocos datos y sin ningún informe clave sobre la amenaza de Al Qaeda y los atentados de Madrid. El Gobierno envió a las 19.55 horas de ayer 24 documentos ordinarios que habían sido solicitados e informó de la imposibilidad de remitir otros 39.

El Ejecutivo confirmó que cinco documentos no figuran en sus archivos. Entre ellos, las actas del gabinete de crisis, convocado por José María Aznar el 11-M. Otros 15 documentos han sido remitidos a la autoridad judicial, por lo que queda en manos del juez Juan del Olmo, la decisión de levantar el secreto sumarial y remitirlos al Parlamento. Otros 29 informes tienen caracter secreto.

Fuentes de la comisión confían en que el Consejo de Ministros del viernes desclasifique y remita la mayor parte de los mismos.