La comisión de investigación del Parlament sobre la denominada Operación Cataluña trasladará a la Mesa de la cámara un escrito para que, además de informar a la fiscalía de las diez personas que no han comparecido pese a ser citadas dos veces, se presente una querella contra todos ellos.

Los diez comparecientes que, en calidad de testigos, no han comparecido ante la comisión son: el presidente del Gobierno,Mariano Rajoy; la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría; y diversos altos cargos, o exaltos cargos, del Estado.

En este último caso figuran: Jorge Fernández Díaz, Jorge Moragas, José Luis Olivera, Juan Ignacio Zoido, Ignacio Cosidó, Manuel Montobbio, Manuel Vázquez, y Enrique García Castaño.

El periodista Eduardo Inda, que había sido citado también, no ha comparecido este martes, motivo por el que volverá a ser citado para el viernes, y de no comparecer de nuevo por segunda vez se añadirá a la decena de personas que podrían ser objeto de una querella.

El Reglamento indica que "si la persona convocada desatiende voluntariamente el requerimiento de comparecer ante una comisión de investigación, la Mesa tiene que dar cuenta de ello a la Fiscalía".

Los grupos que permanecen en la comisión de investigación, que sonJxSí, Catalunya Sí que es Pot y la CUP, ya han dicho que confían muy poco en que la fiscalía pueda instar un procedimiento penal contra los testigos que no han comparecido, motivo por el cual ya contemplan la presentación de una querella contra ellos ante un juzgado de instrucción de Barcelona.

Según el artículo 502 del Código Penal, las personas que, habiendo sido citadas como testigos, no comparezcan en sede parlamentaria ante una comisión de investigación "serán castigados como culpables de un delito de desobediencia".

Este mismo artículo del Código Penal especifica que, si la persona que no ha comparecido es "una autoridad o funcionario público", se le impondrá adicionalmente "una pena de suspensión de empleo y sueldo por un tiempo de seis meses a dos años".