El Congreso admitió ayer tramitar el Estatuto de la Comunidad Valenciana con el apoyo del PSOE y el PP, la abstención de los nacionalistas y el único voto en contra de IU. Además, el Gobierno y el PSOE fijaron los límites para el Estatuto catalán e incidieron en que las Cortes tienen la última palabra sobre el alcance de las reformas. El PP presentó el texto valenciano como la "referencia" para el resto, y pidió al Gobierno extender a los que vengan el pacto entre los dos grandes partidos.

El debate, que superó las seis horas, se inició con la defensa de la propuesta de reforma por parte de los representantes del Parlamento valenciano: Joan Ignasi Pla (PSPV) y Serafín Castellano (PP). La vicepresidenta María Teresa de la Vega defendió la propuesta valenciana porque cumple las condiciones de "consenso" de origen y "constitucionalidad" que exige el Gobierno. El presidente destacó que el proceso valenciano "es el camino" a seguir, porque concita un amplio acuerdo. Y añadió que demuestra a "los inmovilistas" el "acierto histórico" de las reformas estatutarias.

Los portavoces del PSOE y el PP defendieron el pacto suscrito para tramitar el texto valenciano, pero evidenciaron sus diferencias respecto a futuras reformas. Mientras Alfredo Pérez Rubalcaba sentó que el proceso estatutario no debe ser "tutelado", ni "fotocopiado", Federico Trillo exigió que el "consenso" logrado en Valencia se convierta en condición sine qua non para el resto. Es decir, que los estatutos sólo se cambien "si hay un acuerdo entre los dos grandes partidos nacionales, que representan al 80% del electorado".

PACTO EN MADRID Rubalcaba dejó claro que no tocaba hablar del Estatuto catalán, pero aprovechó el debate --tras el rechazo del plan Ibarretxe -- para fijar los límites que el PSOE pondrá al resto. Y destacó el "carácter paccionado" que deben tener todos, a la vez que dijo que las Cortes tendrán la última palabra.

"Corresponde a las Cortes preservar los tres grandes principios de nuestro Estado autonómico: su unidad, su pluralidad y la solidaridad entre los ciudadanos y los territorios", dijo. El portavoz socialista avanzó que su grupo no consentirá que logre el plácet de la Cámara ningún texto que pretenda establecer "privilegios" para una autonomía.