El jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), Félix Sanz Roldán, aseguró ayer que los riesgos a los que se pueden enfrentar las tropas españolas que a partir de hoy se desplegarán en el Líbano "no son superiores" a los asumidos en otras misiones en las que ha participado España bajo el paraguas de la ONU. "No hay ningún riesgo nuevo o diferente", insistió ante un nutrido grupo de periodistas a los que, junto con el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, detalló las características de la nueva misión. El 26 de septiembre presentarán la información a los grupos parlamentarios.El JEMAD ofreció varios datos para ahondar en esta tesis. Así, aseguró que la zona en la que operarán los militares españoles no es "ni mejor ni peor" que las demás y subrayó que el área minada es menor que en otros territorios. El terreno bajo control español, situado cerca de la localidad de Marjayun (al sureste del Líbano) es un área sensible porque hace frontera con Siria --se acusa a este país de facilitar armas a la guerrilla de Hizbulá--, y los Altos del Golán, invadidos por Israel en 1967. Aún así, Sanz señaló que los soldados encontrarán "desolación, pero también vida". "No podemos pensar que todo lo que encontraremos serán riesgos inesperados", añadió.Los 1.100 soldados (entre ellos 132 inmigrantes y sólo 77 mujeres) que participarán en la misión de paz van a llegar al Líbano en varias fases. La primera parte, formada por más de 500, desembarcará hoy en una playa al sur de Tiro, según precisó el almirante José Francisco Palomino en conversación telefónica desde el buque Galicia. El segundo grupo llegará a finales de octubre y a partir de noviembre el contingente español comenzará a liderar una fuerza internacional.SEGUIMIENTO DIARIOEl ministro destacó que la tropa va a cumplir un objetivo "noble y solidario" y recordó que la misión está amparada por la ONU y ha sido aprobada por unanimidad por el Parlamento. A las preguntas de los periodistas de qué harán los soldados si se reinicia la violencia entre Hizbulá e Israel, tan solo contestó que en Defensa estarán atentos al "día a día" y que tiene confianza en que el despliegue sirva para mantener la paz.El JEMAD explicó que la novedad de la misión es que las reglas de cómo debe actuar cada soldado ante las incidencias han sido "consensuadas" con todos los países y siguen los principios de autodefensa y usos alternativos a la fuerza. Asimismo señaló que por primera vez todos los medios utilizados, incluidos vehículos de transporte, pertenecen al Ejército español.