El diputado José Ramón García-Hernández (Ávila, 1971), diplomático de carrera y encargado de Relaciones Internacionales en el partido, se ha presentado como «el candidato de la ilusión» y ha lamentado que solo Margallo defendiera la posibilidad de un debate de programas entre los candidatos. García-Hernández propone una centralización de las competencias de sanidad y educación para frenar «el secesionismo radical» y una ley para defender los símbolos y las señas del Estado. Si por él fuera, en el PP se harían primarias para cada cargo interno del partido y se limitarían los mandatos a ocho años.