El municipio de Outeiro de Rei, en Lugo, se sumó ayer a los 235 en los que la Oficina del Censo Electoral ha encontrado irregularidades. Los reclusos de la cárcel de Bonxe y los residentes en un geriátrico situado en la localidad han denunciado al alcalde, José Pardo, del PP, que gobierna en mayoría absoluta, por haberles incluido en las listas del censo del municipio sin su consentimiento. La inclusión de ambos colectivos ha incrementado la población censada en Outeiro de Rei en 450 personas. Un incremento que supone algo más del 10% sobre los 4.135 habitantes que tenía hasta ahora este municipio limítrofe con Lugo capital.

El alcalde asume los hechos, pero niega toda irregularidad. Aduce que su intención era actualizar el censo para ver si llegaba a 5.000 habitantes (tiene 4.135), lo que permitiría aumentar de 11 a 13 concejales. Pardo recordó además que algunas transferencias dependen del número de residentes y subrayó que lo hecho es un procedimiento administrativo que no enmascara ninguna voluntad torticera.