El acto de reconocimiento del Congreso a los diputados que hace 25 años aprobaron la Constitución resultó frío y deslucido por las ausencias de destacados parlamentarios y por la falta de solemnidad de la celebración, que fue criticada por muchos de los asistentes. A la invitación de la presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, acudieron menos de la mitad de los diputados de las Cortes constituyentes de 1977. Las ausencias fueron señaladas. El único presidente del Gobierno que asistió al acto fue Leopoldo Calvo Sotelo. No acudieron ni justificaron su ausencia Adolfo Suárez y Felipe González.

Además, no estuvieron seis de los siete ponentes del texto constitucional. Sólo Gabriel Cisneros, actual diputado del PP, acudió a la cita. Faltaron los demás padres de la Constitución: Manuel Fraga, Gregorio Peces Barba, Miquel Roca, Jordi Solé Tura, Miguel Herrero, Rodríguez de Miñón y José Pedro Pérez Llorca. También se echaron de menos a Jordi Pujol y Xabier Arzalluz, aunque acudieron el convergente Maci Alavedra y el nacionalista vasco Andoni Monforte.

LAS CRITICAS Los socialistas Alfonso Guerra y Rodríguez Ibarra comentaron la "cutrez" de la celebración, tanto por el hecho de haberla hecho en una sala del edificio y no en el hemiciclo del Congreso como por la desorganización del acto, ya que se nombró incluso a algún diputado ya fallecido. Sin embargo, la celebración tuvo momentos emotivos por el reencuentro entre parlamentarios que no se veían desde hacía muchos años como Santiago Carrillo, Marcelino Camacho, Pablo Castellano y Oscar Alzaga, entre otros.