El palestino Jamil El-Banna, uno de los tres residentes británicos presos en la cárcel estadounidense en Guantánamo (Cuba) que fueron devueltos este miércoles al Reino Unido, ha sido detenido a petición de España, confirmó hoy a Efe Scotland Yard. El-Banna, de 45 años, fue detenido en respuesta a una "orden europea de arresto (euro-orden) emitida en nombre de las autoridades españolas" en relación con "presuntos delitos terroristas", dijo una portavoz de Scotland Yard.

El sospechoso fue detenido por agentes de la brigada de la unidad de extradición de la Policía Metropolitana de Londres (Scotland Yard) y ha sido interrogado en una comisaria de Luton, al norte de la capital británica. El palestino comparecerá hoy ante el tribunal de Westminster (centro de Londres), encargado de los casos de terrorismo en el Reino Unido, agregó la misma fuente, sin precisar la hora de la comparecencia.

Jamil El-Banna, el libio Omar Deghayes y el argelino Adennour Samuer llegaron el miércoles por la noche al aeropuerto de Luton tras ser liberados de Guantánamo, donde han permanecido recluidos durante varios años sin ser acusados ni sometidos a ningún juicio. Deghayes, de 38 años, y Samuer, de 34, fueron detenidos en aplicación de la Ley Antiterrorista del Reino Unido bajo sospechosa de la comisión, preparación o instigación de actos de terrorismo.

El libio y el argelino fueron trasladados a la comisaría de máxima seguridad de Paddington Green, en el centro de Londres, para ser interrogados. Las autoridades estadounidenses habían acusado al palestino de financiar y reclutar activistas para Al Qaeda, al libio de asociación con esa red terrorista y al argelino de asistir a campos de entrenamiento de terroristas en Afganistán.

Los tres hombres llegaron en un vuelo chárter acompañados por agentes de la brigada antiterrorista de la Policía Metropolitana y un médico, informaron fuentes de esa fuerza. Según la cadena pública británica BBC, se espera que otro residente británico, el saudí Shaker Abdur-Raheem Aamer, sea también liberado y repatriado a Arabia Saudí, mientras que un quinto residente británico, el etíope Binyam Mohamed, permanecerá en Guantánamo.

El Gobierno del primer ministro británico, Gordon Brown, solicitó la liberación de los prisioneros en agosto pasado en un cambio de política, dado que previamente se había negado a intervenir en casos que no afectasen directamente a ciudadanos británicos. Los cinco hombres, algunos de los cuales han vivido y trabajado en el Reino Unido durante décadas, tenían estatus de refugiados o permiso de residencia permanente o excepcional en este país antes de su arresto.