El exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Jorge Dezcallar, ha reconocido en su comparecencia ante la comisión parlamentaria que investiga los atentados del pasado 11 de marzo en Madrid que este organismo estuvo "un poco fuera de juego" en relación con la investigación hasta una reunión del día 16, cuando comenzó a recibir formalmente datos sobre la ésta.El juez Juan del Olmo ha advertido en un auto judicial de la posibilidad de que las "células de apoyo" que "han podido participar de muy distinto modo en los atentados" del 11-M pueden sustituir a la "célula operativa" que perpetró la matanza, después del suicidio de siete de sus miembros y de que otros hayan sido enviados a prisión.Además, el magistrado de la Audiencia Nacional ha alertado de que los terroristas posiblemente aún tienen en su poder cerca de 20 kilos de dinamita, es decir, un poco menos del 10% de la que transportaron.Dezcallar pide mayor coordinaciónEn su comparecencia ante la comisión, Dezcallar ha abogado por una mayor coordinación entre los diferentes servicios de seguridad, que es "lo más difícil de conseguir", toda vez que, según ha dicho, es lógico que quién "encuentra un dato, quiera trabajar con él".El exresponsable del CNI ha explicado que en un primer momento este organismo atribuyó la matanza a ETA, aunque esta pista fue "debilitándose" a medida que aparecían otros indicios y, especialmente, cuando se encontró en un papelera la cinta de vídeo reivindicativa de la matanza.Desestimados varios recursos de los detenidosEl magistrado de la Audiencia Nacional ha remitido al Congreso una resolución en la que ha desestimado varios recursos interpuestos por algunos de los detenidos en prisión, muchos de ellos relacionados con el entramado de los explosivos.En el mismo auto --para el que ha levantado parcialmente el secreto del sumario, al ser continuación del que notificó el pasado 18 de junio-- Del Olmo ha destacado que "la preparación material de los atentados se materializó en escasos meses", teniendo en cuenta que los primeros contactos para obtener explosivos y detonadores comenzaron en el último trimestre del 2003 y entre el 25 de febrero y el 8 de marzo la "célula operativa" se proveyó de las tarjetas de móvil utilizadas para la elaboración de los artefactos.Los terroristas tienen el 10% de la dinamitaLa Unidad Central de Desactivación de Explosivos-NBQ de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana del Cuerpo Nacional de Policía calcula que los terroristas que cometieron los atentados del 11 de marzo podrían disponer aún de menos del 10% de la dinamita que adquirieron para el 11-M, según consta en un auto del juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo hecho público hoy.Según la resolución, la cantidad de explosivos que pudiera haber quedado sin utilizar tras los atentados de Madrid, el intento frustrado de la vía del AVE y la explosión de Leganés, sería menor al 10% de la cantidad sustraída.La policía cifra en 250 litros la capacidad del maletero de un vehículo turismo medio, lo que supone que podría transportar una cantidad aproximada de 210 kilogramos de dinamita en bolsas.Más de un viaje"La suma de 142 kilogramos empleados en los artefactos de los trenes de cercanías (11-M) y la vía del AVE (localizado el pasado 2 de abril), 17,4 recuperados y 20 (utilizados en Leganés) en acción suicida, serían unos 178 kilogramos, a los que hay que añadir el explosivo esparcido y el succionado. Sobre estas estimaciones y suponiendo un sólo transporte en este tipo de vehículo la cantidad que pudiera quedar de explosivo sería menor al 10%", señala el auto.No obstante la propia resolución, indica que los detenidos en Asturias realizaron más de un viaje a Madrid transportando la dinamita en bolsas en los autobuses de línea ALSA. Así lo hicieron Sergio Álvarez Sánchez (en libertad), Antonio Iván Reis y el menor que se encuentra internado en un centro madrileño por su participación en el 11-M.