El presidente brasileño mostró todo su apoyo en la lucha internacional contra el terrorismo, pero mantuvo ante los parlamentarios españoles que "el desarrollo económico y la justicia social deben ir de la mano. La ausencia de uno de esos elementos es lo que crea el espacio para la disgregación, el autoritarismo, el narcotráfico y el terrorismo".

Junto a José María Aznar, Lula expresó el compromiso histórico de su partido contra cualquier forma de terrorismo. Aunque también solicitó al Gobierno español que convenza a sus socios de la Unión Europea de que la mejor manera de combatir el terrorismo consiste en vertebrar "una gran política de desarrollo" para obtener "una gran política social".