Representantes de los distintos sectores del PNV apuraban ayer la negociación en búsqueda de un pacto sobre la composición de la nueva ejecutiva y la identidad del presidente que sustituirá a Josu Jon Imaz. El objetivo es lograr un consenso la próxima semana aunque se descarta que la decisión se adopte mañana.

Tampoco se confirmó que un grupo de afiliados hubiera presentado firmas para avalar la candidatura de Iñigo Urkullu como nuevo jefe del partido. Fuentes oficiales de la organización vizcaína dijeron que "ni se confirma ni se desmiente" la noticia divulgada por El Correo anunciando que seguidores peneuvistas remitieron a última hora del viernes a la Comisión de Garantías y Control las firmas para confirmarlo.

El sector soberanista aglutinado en torno a Joseba Egibar ha renunciado por ahora a respaldar la candidatura de su líder en espera de que avance la negociación. Según resulte, podrían optar por consagrarle como aspirante a propuesta de al menos tres organizaciones municipales tal y como lo hicieron en el 2003, cuando Egibar compitió con Imaz.