Diversas fuerzas políticas criticaron hoy el plan de reforma laboral que presentaron ayer el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, a los líderes de la patronal y de los sindicatos y reclamaron una mayor concreción de las propuestas. Desde Barcelona, Corbacho agradeció hoy el "acto de responsabilidad y seriedad" mostrado por sindicatos y empresarios al conocer la propuesta del Gobierno y se mostró "convencido" de que todas las partes serán capaces de sellar "un buen acuerdo".

Por su parte, el vicesecretario de Organización del PSOE, José Blanco, invitó al Partido Popular a que se sume al acuerdo entre Gobierno, sindicatos y patronal y a abandonar "el populismo" por "una vez" para hacer un "acto de patriotismo". Desde el PP, su vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons, afirmó que las propuestas sobre la reforma laboral "no son eficaces si no acaban concretándose", pero ha ofrecido el apoyo de su partido al Gobierno en la negociación con los agentes sociales.

Para el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, el documento presentado ayer contiene "unas bases muy generales con las que es difícil no estar de acuerdo", ya que "son principios que todos compartimos" de contratación de los jóvenes, evitar la concatenación de contratos o reorientar la bonificación de la contratación. No obstante, Herrera afirmó que España vive un momento de "emergencia nacional" y alertó sobre la frustración de las expectativas que se producirá si en las próximas semanas los agentes sociales y el gobierno no concretan.

En este sentido también se manifestó la presidenta del Partido Popular de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, quien acusó a Zapatero de haber hecho una "dejación de sus funciones" al presentar un documento de reforma laboral "de líneas generales", "de principios" y sin propuestas concretas. El jefe del Ejecutivo riojano, Pedro Sanz, dijo que espera que la reforma "no sea blanda y contribuya a generar empleo, riqueza y marque el camino de por dónde tienen que ir las soluciones y las medidas para salir de la crisis". Más crítico fue el presidente de CiU, Artur Mas, para quien el Gobierno "va a la deriva" y sin "capitán" y ha calificado de "light" la reforma laboral propuesta, además de que "llega tarde". porque el Ejecutivo debería "haberse puesto las pilas" y acometerla hace tiempo.

El presidente de ERC, Joan Puigcercós, aunque opinó que la reforma es positiva, "llega tarde" al tiempo que recordó que "se le ha pedido al Gobierno español que hiciera una reforma clara desde hace tiempo pero el mismo Gobierno negaba sistemáticamente la crisis, decía que era una simple recesión, que no había una crisis y que por lo tanto no había problema". El coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, criticó la propuesta de reforma y dejó "claro" que IU no respaldará medidas como el abaratamiento del despido para jóvenes al considerar que merma sus derechos, mientras que el candidato de ICV-EUiA a la Generalitat, Joan Herrera, reclamó al Gobierno "un giro a la izquierda".

Sin embargo, la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, consideró "un gran resultado" el acuerdo alcanzado ayer entre Gobierno, patronal y sindicatos sobre la reforma laboral, dirigida a dinamizar el mercado de trabajo sin recortar derechos. Por su parte, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, reiteró que la propuesta "es una buena base de partida".