El Cuerpo Nacional de Policía ha detenido esta madrugada en Vizcaya a dos presuntos colaboradores de ETA, a los que relaciona con el atentado contra el cuartel de la Guardia Civil de Calahorra (La Rioja) del 2008, y a cuya pista contribuyó la detención la semana pasada de otros dos etarras en Girona.

Según han informado fuentes de la lucha antiterrorista, los dos detenidos esta madrugada son Urko Izagirre Iriarte, arrestado en el número 13 de la calle de Bidebarri, en Algorta (Getxo), cerca de Bilbao, y Enrique Noya Santos, en el 5 de la calle de Elorrieta, en la capital vizcaína.

Ambos están acusados de haber prestado una furgoneta para la comisión del atentado contra la casa cuartel de Calahorra ocurrido el 21 de marzo del 2008, aunque no fue el vehículo usado como coche-bomba. La explosión causó numerosos destrozos, aunque no hubo pérdidas humanas.

70 KILOS DE EXPLOSIVO

El coche-bomba estaba cargado con 70 kilogramos de explosivos, y fue el jefe del comando Vizcaya, Arkaitz Goikoetxea, ya detenido, el que realizó la llamada que avisó del atentado.

La pista que ha permitido las detenciones de hoy ha sido la de Jon Rosales y Adur Aristegi, los dos detenidos la semana pasada cerca de Camprodon (Ripollès) cuando intentaban huir a Francia.

Aristegi ya fue detenido en julio del 2008 por colaborar con el desarticulado comando Vizcaya, que entonces lideraba Arkaitz Goikoetxea.