Dos meses tardó la policía en atrapar a los dos sucesores de la cúpula desarticulada en Bidart, los dirigentes Iñaki de Lemona y Rosario Picabea.

El golpe más duro a ETA desde 1992. El líder de la banda, Mikel Antza, y la jefa de los comandos legales, Anboto, cayeron en Salis-de-Béarn.

La policía francesa detuvo en Burdeos a Francisco Javier López Peña, Thierry, considerado el número uno de ETA, y a otros dos terroristas.