El apoyo al uso del velo islámico en los centros educativos le ha costado caro a Fátima Mohamed, edila del PP en Gines (Sevilla): ayer presentó su dimisión por sentirse "discriminada". Asegura que en los últimos dos años ha sido "vetada" en el partido por su defensa del hiyab y lamenta que dirigentes conservadores critiquen la prenda cuando antes "se hicieron fotos" con ella para dar a entender que apoyaban otras creencias. La cúpula del PP-A responde que su marcha es por rencillas internas de la agrupación.

Mohamed, de 45 años, ha sido militante del PP 15 años y concejala en Gines durante los últimos ocho. Musulmana nacida en Melilla, siempre ha defendido el uso del hiyab, que luce con orgullo como "símbolo de unas creencias y una cultura", pero la postura del PP ante el incidente protagonizado por una adolescente en Pozuelo de Alarcón (Madrid) ha motivado su marcha. "Me han demostrado que no me quieren", resumió ayer. Ahora se incorporará al Grupo Mixto.

A sus compañeros la decisión no les ha pillado por sorpresa, ya que llevaban tiempo distanciados, sobre todo tras la dimisión del marido de la edila, que fue alcalde del municipio con el PP en el anterior mandato. Desde el PP-A critican que haya usado la polémica del velo como "coartada" y justifican su baja en las "tensiones habituales" en la elaboración de las listas municipales. Los concejales dicen que nunca ha habido conflictos por el hiyab y que "siempre" han respetado el velo.

REGULACION "INNECESARIA" Mientras tanto, el director de la Secretaría de la Alianza de la Civilizaciones, Mark Scheuer, aseguraba ayer en Córdoba que las controversias por el uso del velo son problemas "aislados" que hacen innecesaria una regulación global en la UE. Sin embargo, el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, se mostró en desacuerdo y propuso desde Madrid que los consejeros de Educación de todas las comunidades autónomas españolas se reúnan con el ministro de Educación, Angel Gabilondo, para unificar los criterios.