El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero rompió ayer una de las pautas que se había impuesto: no desmentir jamás las informaciones sobre supuestos contactos con ETA. Pero la Moncloa se sintió obligada ayer a salir al paso de una noticia que, de ser cierta, habría socavado la credibilidad del presidente. Y es que el diario Abc publicó el domingo que emisarios del Gobierno se reunieron en abril con dirigentes de ETA, pese al compromiso de Zapatero de cancelar el diálogo con la banda tras el atentado de la T-4 de Barajas.

El Gobierno desmintió esta información porque el citado rotativo aseguraba que en ese supuesto encuentro se negoció la presencia de Batasuna, ANV mediante, en las elecciones del próximo 27 de mayo.