Treinta y cinco días después del accidente aéreo de Trebisonda (Turquía) en el que murieron los 62 militares españoles que regresaban de una misión en Afganistán, sus familias siguen sin recibir los efectos personales de los fallecidos. ¿Olvido o desidia? "Ninguna de ambas cosas", asegura un portavoz de Defensa. "Lo que pasa es que el trabajo para inventariar e identificar las pertenencias ha sido laborioso y aún hay objetos que no sabemos a quién pertenecen".

El portavoz de las familias, Carlos Ripollés, reiteró que "las pertenencias llevan almacenadas tres semanas en la base aérea de Getafe" y señaló que entre las mismas puede haber "elementos comprometedores". También se quejó de que se les hayan enviado las autopsias por correo. "Te llega un sobre y te encuentras los datos de la autopsia del hijo, el hermano, el marido muerto... es tremendo", dijo.