Desde el 11-S, la ONU ha aprobado siete resoluciones condenando atentados terroristas, pero sin culpar a ningún grupo en particular. La excepción ha sido la resolución 1530 del 11 de marzo del 2004, en la que la ONU condenó, a instancias del Gobierno español, a ETA por el 11-M.

Entre las seis resoluciones previas están la resolución 1368 del 12 de septiembre del 2001, que condenó los atentados del 11-S contra EEUU; la resolución 1438, que condenó los atentados de Bali (Indonesia) del 12 de octubre del 2002; la resolución 1440, que condenó la toma de rehenes en Moscú el 23 de octubre del 2002 y la resolución 1450 del 13 de diciembre del 2002, que condenó el ataque terrorista contra el Hotel Paraíso de Kikambala (Kenia) y el intento de ataque con misiles contra el vuelo 582 de Arkia Israeli Airlines, el 28 de noviembre del 2002.