ETA mantiene su ofensiva contra los empresarios y ayer volvió a destrozar una discoteca, en este caso en Urdax (Navarra), sin causar víctimas. Una furgoneta bomba con 40 kilos de explosivos --la banda emplea cada vez más cantidad-- causó graves destrozos en la sala La Nuba. Una llamada a la DYA de Guipúzcoa permitió desalojar a 24 vecinos. ETA ya destruyó en diciembre otra discoteca en Santesteban (Navarra). A. U.