ETA ha vuelto a exigir el pago del denominado impuesto revolucionario . La banda terrorista ha enviado en las últimas semanas una remesa de cartas a empresarios vascos en las que les reclama pagos de entre 60.000 y 70.000 euros, según informó ayer El Correo .

Las misivas están escritas en el mismo tono que ETA empezó a emplear en este tipo de extorsión tras declarar el alto el fuego, en marzo del 2006. Escritas en castellano y euskera, invitan a hacer una "aportación" para el "proceso de liberación y construcción nacional", y concluyen con un "respetuoso y cálido abrazo revolucionario". La patronal vasca, Confebask, confirmó la recepción de cartas, si bien un portavoz opinó que no forman parte de una campaña "masiva", informa Efe.

Fuentes de la investigación antiterrorista consideran que ETA apenas cuenta con recursos económicos y sospechan que la banda confía en que el atentado de Barajas, que causó la muerte de dos personas, amedrente a los empresarios y sirva de advertencia para los que optaron por no pagar desde el anuncio de alto el fuego. Desde entonces, se han detectado al menos cuatro envíos de cartas por parte de ETA a empresarios.

Todos los partidos condenaron la extorsión de ETA a los empresarios y varios emplazaron a Batasuna a distanciarse de la violencia. El secretario general del PP de Euskadi, Carmelo Barrio, atacó al Gobierno de Zapatero y dijo que los terroristas envían cartas a empresas porque ETA "se ampara en la debilidad del Gobierno para mantener la presión a la sociedad".

COINCIDENCIAS El líder de los socialistas vascos, Patxi López, cosideró "absolutamente inaceptable" la campaña de extorsión. Asimismo, en un acto del PSE en Bilbao, dijo que "Navarra no está en juego, excepto para el PP y la izquierda aberzale", y destacó algunas coincidencias entre populares y aberzales. Así, destacó que el PP y los aberzales de Arnaldo Otegi "no solo coinciden en poner en cuestión a Navarra; también lo hacen cuando presentan a De Juana como vencedor del Estado de derecho".