Decía Enrique Tierno Galván, con la ironía sutil que empleaba en sus observaciones po- líticas, que los miembros de ETA son los "últimos españoles violentos". Se refería a la secuencia de oscurantismo e intransigencia que ha hecho dramática nuestra historia y a la condición de españoles que irremediablemente, para ellos y para nosotros, afecta a estos fanáticos asesinos. La policía ha distribuido los retratos de seis terroristas a los que se pretende detener con ayuda de la población. Solo es cuestión de tiempo el que podamos observar sus comportamientos primitivos en la jaula de vidrio de la Audiencia Nacional, jactándose de sus crímenes para ocultar su vacuidad.

Arnaldo Otegi, desde la cárcel, ha echado en cara al Gobierno no haber tenido ni la ambición ni la madurez necesarias para llegar a un acuerdo con ETA. A la vista del comportamiento de los etarras perseguidos, la explicación de la falta de entendimiento es bien distinta: los actuales miembros de ETA no tienen capacidad intelectual para entender su situación de búsqueda y captura. Huyen en taxi o dejan abandonados los explosivos. Ya no disponen de guaridas seguras y carecen --afortunadamente para todos-- de los entrenamientos y los medios que tuvieron. Son una tropa en desbandada que todavía puede matar, pero que está liquidada por su propia historia.

Los rostros de los etarras buscados son también los de delincuentes vulgares: esas imágenes no pueden contener ninguna mística impostada que pretenda dar trascendencia a sus crímenes; el terrorismo de origen vasco es de naturaleza policial: en esta Europa aventada por Bin Laden no hay policía que no esté puesto para detectar a cualquiera que lleve una pistola y quiera imponer la ley del terror.

Los últimos españoles violentos han desperdiciado la postrera ocasión que les ha dado la historia para convertirse en personas. Esta especie residual de íberos salvajes solamente puede se reducida aplicándoles las cadenas. Aunque Otegi no lo diga, no se ha podido negociar con quien no tiene cerebro para entender su situación.