La operación policial Duna ha certificado las advertencias que en las últimas semanas han lanzado varios especialistas en terrorismo en las que alertaban de que Ceuta es hoy un vivero de radicales islámicos del que ya ha salido al menos un voluntario para combatir en Irak. Según un estudio de los expertos en terrorismo de la Universidad de Granada Javier Jordán y Humberto Trujillo, algunas barriadas ceutís, sobre todo la del Príncipe Alfonso, "constituyen uno de los entornos sociales más favorables para el reclutamiento yihadista de toda la geografía española".

En el informe Entornos favorables al reclutamiento yihadista: el barrio del Príncipe Alfonso , los especialistas dicen que "se tiene constancia de que al menos un joven del barrio dedicado al tráfico ilegal ha ido a combatir a Irak".

Además, afirman que "existe información sobre la presencia de ciertos psicólogos que saben ganarse la confianza de los jóvenes del barrio. Hay motivos para pensar que podría tratarse de reclutadores yihadistas". En el informe se explica, además, que hay "al menos un predicador radical proveniente de Arabia Saudí en uno de los pequeños oratorios del barrio" de Príncipe Alfonso. Jordán y Trujillo alertan de que esa barriada ceutí habitada solo por población musulmana "lleva camino de convertirse en un área parcial o totalmente controlada por los radicales".

Los especialistas han detectado la presencia de predicadores salafistas que persiguen la estrategia marcada por los líderes del movimiento y que consiste "en crear en Europa espacios urbanos de mayoría musulmana donde la sharia ley islámica regule el comportamiento y las normas de convivencia.

Pero Ceuta no es la única zona de España donde ha echado raíces la amenaza terrorista. Ambos expertos señalan que "la militancia yihadista está extendida por toda la geografía, particularmente en Madrid, Cataluña, Andalucía Oriental y el Levante".