ETA robó el coche bomba que estalló en Legutiano en Francia el pasado 16 de abril, por lo que se cree que el artefacto se preparó en este país, aunque el temporizador final pudo ser activado por uno de los etarras justo delante del cuartel. El primer dato hace conjeturar a la Guardia Civil que ETA ha reconstruido su fábrica de explosivos en Francia o al menos tiene un buen experto en la materia, como han demostrado también otros atentados.

En cualquier caso, todas las fuentes de la lucha anti-ETA consultadas coinciden en afirmar que ETA no está tan débil como se pensó tras la tregua. El comando Vizcaya , como se denomina genéricamente a los grupos que cada vez con mejor fortuna han actuado desde el verano, está formado por varios taldes que se mueven en una zona tan amplia entre las tres provincias "que es imposible realizar una operación jaula", según una fuente. La división tradicional entre funciones parece haberse acabado. Cada grupo recibe órdenes genéricas sobre cuándo y contra qué objetivo atentar desde un aparato militar muy blindado, y después elige lo más fácil.

En esta ocasión, se cree que participaron cuatro etarras, uno de ellos mujer. Se está analizando el ADN de un pasamontañas encontrado en el coche de la huida, así como los restos de explosivos, en busca de datos. La hipótesis principal es que usaron más de 100 kilos de amonal.