Los familiares de los 62 militares que fallecieron el pasado 26 de mayo en el accidente aéreo de Turquía estudiaron ayer la posibilidad de constituir una asociación de afectados por si finalmente deciden acudir a los tribunales para pedir responsabilidades por lo ocurrido. Los allegados de las víctimas se reunieron todos por primera vez en Zaragoza, pero no facilitaron ninguna información oficial sobre el contenido del encuentro, que duró unas tres horas.
La tragedia por el accidente del avión Yak-42 de una empresa ucraniana que transportaba militares españoles a Zaragoza ha levantado una fuerte tormenta política por las supuestas malas condiciones en las que se encontraba el aparato, alquilado por el Estado Mayor del Ejército para que los soldados que desempeñaban tareas humanitarias en Afganistán regresaran a España.
DEMANDA CIVIL
Dos familias de afectados de Zaragoza se pusieron en contacto recientemente con el abogado Javier Hernández para sopesar la posibilidad de interponer una demanda civil contra la compañía propietaria de la nave, Ucranian Mediterranean Airlines (UM Air). A ellos, según Hernández, se unieron otras ocho y organizaron el encuentro de ayer, en el que pretendía participar un despacho de abogados de Madrid con experiencia en este tipo de catástrofes.
Sin embargo, los afectados prefirieron que ni los abogados ni la prensa accedieran a la reunión. Según explicó Hernández a este diario, sus clientes le aseguraron que en el encuentro se barajó crear una asociación. Otra de las afectadas, sin embargo, señaló que el encuentro sólo sirvió de momento para que las familias se conocieran.
Muchos de los afectados coinciden en su malestar por la falta de información de Defensa. "El Gobierno parece que quiere pasar página lo más pronto posible", dijo un familiar del soldado Carlos Oriz.
