La Fiscalía de la Audiencia Nacional mantuvo ayer su petición de 14 años de prisión para Santiago David Garaboa, al que acusa de ser el máximo responsable del GRAPO y del PCE(r), el órgano político de ese grupo terrorista. El fiscal acusó a Garaboa de integración en banda armada en condición de dirigente, de falsificación y de una falta contra el orden público. Por todo ello, le consideró "no un mero integrante, sino dirigente o jefe de grupo" de la banda.

El fiscal basa su acusación en la documentación hallada en el piso que Garaboa ocupó en Valladolid entre abril del 2002 y febrero del 2003. Garaboa confirmó su militancia en el PCE(r), pero aseguró que "nunca" ha participado en una acción armada.