La Audiencia Nacional juzgará el próximo viernes al presunto colaborador de la banda terrorista ETA Andoni Aspiazu Alcelay por dar cobijo al etarra Ibai Ayensa cuando éste resultó herido en 1999 al manipular un artefacto explosivo, hechos por los que la Fiscalía pedirá para él 8 años de prisión.

Según el escrito de conclusiones provisionales, la noche del 28 de diciembre de 1999 Ayensa y Sergio Medina (ya condenados) intentaron atentar contra una entidad bancaria en Pamplona, pero el artefacto explotó al intentar ponerlo en funcionamiento y ambos resultaron heridos.

Medina fue detenido a la mañana siguiente en el hospital al que había acudido para curarse sus heridas, mientras que Ayensa se refugió los dos días siguientes en el domicilio de los también condenados Pedro Miguel Caballero y Sagrario Ortigosa en la localidad navarra de Berriozar.

Añade el fiscal que el acusado, "conocedor" de que Ayesa era miembro de ETA y de que estaba herido, lo recogió en la estación de autobuses donostiarra de Amara y lo trasladó hasta su casa en Azkoitia (Guipúzcoa), donde lo ocultó desde el 1 de enero de 2000 hasta mediados de febrero para "evitar su localización y detención".

El Ministerio Público, que considera que concurre la agravante de reincidencia, ya que Aspiazu Alcelay fue condenado por colaboración con banda armada en 1996 a seis años de cárcel, solicita, además de la pena de cárcel, una multa de 8.100 euros.