Transcurridos más de tres años desde la tragedia aérea de Turquía, el caso Yak-42 sigue dando disgustos al PP. El último se lo proporcionó ayer el director del Instituto Forense Turco, Keramettin Kurt, quien desveló las maniobras del equipo del popular Federico Trillo, ministro de Defensa cuando se produjo el accidente en el que murieron 62 militares españoles en Turquía, para endosar a las autoridades de Ankara la identificación errónea de la mitad de los cadáveres. Según el forense, colaboradores de Trillo intentaron que el Gobierno de Turquía asumiera por escrito los errores de las actas de identificación.

En una entrevista al diario turco Milliyet, Kurt recuerda que los funcionarios españoles que se personaron en Trebisonda horas después del accidente "querían hacer las pruebas de ADN" en España, pero las autoridades turcas se negaron argumentado que antes debía completarse la identificación de los 62 cuerpos. "Insistieron y les dimos todos los cuerpos firmando un documento. Se habían establecido las identidades de 32 soldados", relata el forense, quien concluye: "En los otros cadáveres, sencillamente pusieron unas pegatinas con los otros nombres. Pensaron que el muerto, muerto está; nadie va a indagar más".

Es a renglón seguido cuando confiesa --"es la primera vez que lo digo; hasta ahora me lo había guardado"-- que meses después, a finales del 2003, "un viceministro de Defensa y unos generales españoles" le visitaron para "librarse del escándalo". "Firmad este papel para reconocer que el error en las identificaciones es vuestro", fue el ruego que le trasladó la delegación española, según recuerda Kurt, que no desvela en ningún momento los nombres de sus interlocutores.

LOS GENERALES En aquella época el número dos del Ministerio de Defensa era Fernando Díez Moreno, y los generales que asistieron en Turquía a la identificación de las víctimas del accidentado Yak-42 fueron Vicente Navarro y Juan Antonio Beltrán, destituidos en el año 2004 por el Gobierno del PSOE.