El presidente del PP gallego, Manuel Fraga, arremetió ayer contra el que fue su delfín, Xosé Cuiña, después de que éste anunciara su candidatura para la sucesión con el objetivo de "refundar el partido en clave gallega". Fraga manifestó tajantemente que no es partidario de la refundación.

El líder conservador hizo estas consideraciones tras la reunión del comité ejecutivo del PP gallego, que perfiló los detalles para el congreso que el 14 y 15 de enero elegirá al sucesor del veterano dirigente popular. Preguntado por si ve necesario refundar el PP de Galicia, Fraga afirmó que lo que realmente hace falta es "continuarlo". En su opinión, la palabra "refundación no está en la convocatoria del congreso", que sí elegirá nueva dirección y apostará por la "sucesión generacional". No obstante, apuntó, "si alguno va con esas ideas, ya las expondrá en el congreso".

Sobre si cree que el PP gallego ha perdido autonomía frente al nacional --Cuiña propone ampliar la autonomía del partido en Galicia--, manifestó que, "al contrario" y señaló que la celebración del congreso revela que "la conserva entera", aunque matizó que autonomía no es lo mismo que independencia.