El presidente de la Xunta, Manuel Fraga, aterrizó ayer en la campaña catalana totalmente fuera de programa con una aparición en un festival folklórico organizado por la agrupación cultural gallega Saudade en Barcelona.

Pese a no encajar con la estrategia de campaña del candidato del PPC a la Generalitat catalana, Josep Piqué guardó las formas y fue a saludarle. Eso sí, lo más tarde que pudo para evitar aparecer junto al presidente gallego en los informativos de televisión. Sin embargo, no pudo evitar sufrir el rechazo de una parte del público a la intervención de Fraga en el acto. Cuando subió al escenario acompañado de Piqué, Fraga fue abucheado al grito de "nunca máis", en alusión a la crisis del Prestige .

ESTRATEGAS EN VILO

La propensión de Fraga a salirse del discurso del PP --se ha mostrado abiertamente a favor de reformar la Constitución y los estatutos-- tenía en vilo a los estrategas del partido en Cataluña. Además, el histórico dirigente popular no encaja con la imagen del PP moderno y dinámico que Piqué quiere proyectar.

El equipo de campaña ha seleccionado cuidadosamente a los dirigentes del resto de España que acudirán a apoyar al exministro. Al margen de José María Aznar, Josep Piqué cuenta con el candidato a la Moncloa, Mariano Rajoy, y los vicepresidentes Rodrigo Rato y Javier Arenas como sus principales avaladores.