El juez Santiago Pedraz ordenó ayer el ingreso en prisión de los etarras Joseba Iturbide y Mikel San Sebastián como presuntos autores del atentado, en diciembre del 2006, en la T-4 del aeropuerto de Barajas, que costó la vida a los ecuatorianos Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate. Los terroristas fueron detenidos en febrero en San Juan de Luz (Francia), en una operación con la policía francesa, y ayer París les entregó a las autoridades españolas. En este atentado están imputados también Igor Portu y Mattin Sarasola.

Además, los entregados están relacionados con la explosión de un coche bomba en Castellón en agosto pasado y con los preparativos para la colocación de otro vehículo con explosivos en el complejo comercial y de oficinas AZCA de Madrid.