Los reproches de Rodrigo Rato no han hecho mella en el alcalde de Madrid, el popular Alberto Ruiz-Gallardón. Después de que el vicepresidente económico del Gobierno le criticara el pasado lunes por anunciar la subida de varios impuestos municipales, ayer Ruiz-Gallardón negó que Rato esté "autorizado" para llamarle a capítulo.

Aferrándose a que Mariano Rajoy ha guardado un cauto silencio sobre esta polémica, el alcalde de Madrid y presidente en funciones de la comunidad autónoma madrileña, Ruiz-Gallardón, dijo ayer contar con el "pleno apoyo" del Partido Popular. "Bastaría una sola manifestación de alguien autorizado, como el secretario general del partido, de discrepancia con nuestras medidas, para que inmediatamente no siguiera adelante con un proyecto que está directamente plasmado en el programa electoral" (del PP madrileño), declaró Gallardón a la COPE, en respuesta a las críticas vertidas por Rato.

Tras negar toda autoridad al vicepresidente primero del Gobierno para condicionar su gestión, Gallardón precisó: "No tengo cuentas pendientes con Rato ni creo que él las tenga conmigo. Nunca me he cruzado en un camino contradictorio con lo que haya podido hacer Rato".

REPLICA DEL VICEPRESIDENTE

Desde Bruselas, el número dos del Ejecutivo popular no quiso echar más leña al fuego, pero tampoco desdecirse de sus declaraciones del lunes, cuando retó a Gallardón a imitar a su predecesor popular en el cargo, José María Alvarez del Manzano, y dar a la ciudad "más por menos". Aunque ayer negó que su aviso entrañara crítica alguna, Rato volvió a exigir que "el alcalde y sus colaboradores expliquen las medidas que han tomado".