El juez Baltasar Garzón ordenó ayer la detención de ocho miembros de la Udalbiltza Kursaal (asamblea de antiguos concejales de Batasuna), a los que acusa de promover y controlar por encargo de ETA las candidaturas independientes presentadas a las elecciones municipales del 25 de mayo. Entre los detenidos figura el portavoz de Batasuna en el Ayuntamiento de Bilbao, Lander Etxebarria.

Garzón considera que los detenidos son dirigentes de Ekin, el aparato político de ETA, a los que encomendó recomponer la estructura electoral de la ilegalizada Batasuna. La plataforma AuB y otras candidaturas independientes que se presentan a las próximas elecciones serían su instrumento.

El ministro del Interior, Angel Acebes, lo resumió así: "ETA había encomendado el control de AuB a los detenidos con el fin de reconstruir un nuevo partido, aprovechándose de las instituciones". No obstante, esas candidaturas independientes pasaron ayer el filtro de sus respectivas juntas electorales.

LOS PAPELES DE ´SUSPER´

La investigación judicial comenzó hace más de un año y se reactivó tras la detención del etarra Ibon Fernández, Susper , a quien se intervinieron documentos sobre los planes de ETA para utilizar la asamblea de municipios de Batasuna. Según esos papeles, ETA puso en marcha "un chiringuito" diferente, aunque con las mismas personas, para crear un "contrapoder" al Estado, con una estructura de pequeños ministerios que iba a actuar como un "Gobierno provisional", según fuentes jurídicas.

ETA activó sus planes cuando dio por concluida la tregua, en noviembre de 1999, y el PNV, EA e IU abandonaron la Udalbiltza. La banda contó entonces con una institución paralegal dotada de presupuestos y con una implantación más allá de Euskadi, ya que incluye municipios del País Vasco-francés y Navarra.

Según fuentes jurídicas, ETA aceleró el proyecto en noviembre, a raíz del proceso de ilegalización de Batasuna, para que Udalbiltza "ocultara" las nuevas candidaturas con las que quería seguir estando en las instituciones. Acebes acusó a los detenidos de pretender "destruir la legalidad desde dentro y aprovecharse de la financiación institucional".

Los arrestos se produjeron en Vizcaya, Guipúzcoa y Navarra. La policía registró sus domicilios y precintó las sedes de la Udalbiltza en Pamplona, Vitoria, Bilbao y Astigarriaga (Guipúzcoa). Entre los detenidos figuran concejales de varias poblaciones y responsables de la asamblea de municipios, que ha anunciado movilizaciones de protesta.

Mientras que José María Aznar opinó que la operación "cancela otro disfraz de ETA", el Gobierno vasco se mostró sumamente irritado. El lendakari, Juan José Ibarretxe, acusó al líder del PP de "utilizar Euskadi y lo vasco para sacar votos en España", informa Ana Garbati.