El juez Baltasar Garzón reclamó ayer a los nacionalistas vascos que acaben con la campaña de ataques "desmedidos y desconsiderados" que han dirigido contra la Audiencia Nacional y los jueces después de que la semana pasada la Guardia Civil detuviera al consejero delegado de Sidenor, José Antonio Jainaga, y al gerente de laminados de Hierro Marcial, Jesús Guibert.

El magistrado defendió su trabajo al estarse investigando "hechos muy graves como es la eventual financiación de una organización terrorista", subrayó. También se desmarcó de la actuación policial al negar que hubiera firmado los arrestos.

El pasado viernes, el PNV presentó una propuesta en las Juntas Guipuzcoanas en la que reprobaba "el acoso y detención de ciudadanos vascos, víctimas de la amenaza y el chantaje" de ETA.