El caso Pretoria entró ayer en una nueva fase. El juez Baltasar Garzón y la fiscalía anticorrupción terminaron de interrogar a los nuevos imputados, que quedaron en libertad con cargos. No se prevén por el momento nuevas imputaciones, pero la Guardia Civil ha entregado varios informes al juez que confirman el funcionamiento de la supuesta trama de corrupción que se desarrolló en las localidades barcelonesas de Santa Coloma de Gramanet, Sant Andreu de Llavaneres y Badalona, según fuentes de la investigación.

Los acusados defendieron ante el juez y el fiscal su actividad pública y negaron haberse beneficiado con las operaciones urbanísticas bajo sospecha.

Hasta el momento han sido imputadas 20 personas. Las últimas 11 comparecieron ante el juez entre el jueves y el viernes, y tras declarar no se les impuso ninguna medida cautelar. Sin embargo, fuentes jurídicas han explicado que estas personas fueron convocadas para aclarar su papel en esta trama. "No todos tienen el mismo grado de responsabilidad", apostillaron.

De momento ni el juez ni el fiscal tienen previsto ampliar la lista de imputados. En enero interrogarán a 10 testigos.