El secretario de Estado para la Unión Europea, Alberto Navarro, anunció ayer que el memorando lingüístico que el Gobierno español prevé entregar en Bruselas el 13 de diciembre solicitará que, además del castellano, se pueda usar el catalán, el gallego y el vasco en los plenos del Parlamento Europeo.

Navarro explicó que se repetirá la fórmula usada al presentar las traducciones de la Constitución europea para denominar las lenguas cooficiales, y que no se pedirá la plena oficialidad de estas lenguas en la UE, porque requeriría la unanimidad de los 25, que por ahora no existe.

El documento será presentado por el ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, en la reunión del Consejo de Asuntos Generales y Relaciones Exteriores de la UE el 13 y 14 de diciembre. Demandará, entre otras cuestiones, la posibilidad de que los ciudadanos hagan peticiones en estas lenguas a instituciones europeas. Además, el Gobierno pretende que se puedan emplear en los plenos del Comité de las Regiones y el Parlamento Europeo, "con solicitud previa".

Mientras, el portavoz de la Generalitat valenciana, Esteban González Pons, avisó ayer de que, si el Gobierno no defiende el "valenciano" en Europa, el Ejecutivo de Camps irá a los tribunales, "incluso a la vía penal", para paralizar el memorando.