El Gobierno hará otro movimiento en la marcha hacia la recuperación de la memoria histórica, después de la retirada de la estatua ecuestre de Franco en Madrid. El Consejo de Ministros relevará al duque de San Carlos, Alvaro Fernández-Villaverde, como presidente del patronato que dirige Patrimonio Nacional, cargo que ha ocupado en los últimos ocho años. La responsabilidad de gestionar los bienes del Estado adscritos a Patrimonio --entre los que figura el Valle de los Caídos-- recaerá desde hoy mismo en el diplomático asturiano Yago Pico de Coaña, exembajador en Colombia y actual embajador para las cumbres iberoamericanas.

La vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, de cuyo ministerio depende Patrimonio, cuenta con el plácet del rey Juan Carlos para el relevo. El duque de San Carlos, que es Grande de España, mantiene una estrecha relación con el Monarca.

Fuentes próximas al Gobierno reconocen que el relevo está relacionado con los cambios que pueden producirse en el Valle de los Caídos a raíz del informe que prepara el Gobierno para restituir la memoria de las víctimas del franquismo.