El Gobierno vasco acusó ayer al Partido Popular de "ceguera, sordera y mutismo" ante la colonización del partido por quienes atacaron con cócteles incendiarios la sede socialista de Alcalá de Henares o se dedican a exhibir símbolos franquistas en las manifestaciones. "Ellos sabrán dónde les lleva esa actitud", concluyó la portavoz del Gobierno vasco, Miren Azkarate (PNV), tras recordar que el PP firmó el pacto que le comprometía a no utilizar la política antiterrorista como arma electoral para conseguir votos. A. G