Todos los indicadores sobre el estado de opinión de los españoles resultan favorables para el Gobierno. Así, los satisfechos con la situación económica llegan a su máximo histórico de la serie (un 45,6%; 10 puntos más que tres meses atrás), aunque quienes se muestran descontentos (un 26,2%) se mantienen en un nivel similar que en junio pasado. También crece el porcentaje de quienes creen que la situación económica mejorará en el 2004.

También se ha disparado el número de quienes consideran buena o muy buena la situación política (un 39.7%; 13 puntos más que en junio). El giro respecto a los datos de abril, en plena guerra de Irak, es espectacular: el 43,3% creía que la situación política era mala o muy mala y sólo un 17,3% que era buena o muy buena.

Otro dato positivo para el PP: el 43% de los encuestados consideran que la gestión del Gobierno es buena o muy buena.