Ya avisó y no ha habido manera de hacerle cambiar de opinión. Definitivamente, el expresidente del Gobierno Felipe González no encabezará, como hace cuatro años, la lista del PSOE por Sevilla en las próximas elecciones generales de marzo. Ni el secretario general del partido, José Luis Rodríguez Zapatero, ni el presidente, Manuel Chaves, han logrado convencerle.

En su lugar, el cabeza de cartel por Sevilla será Alfonso Guerra, el exvicepresidente del Ejecutivo, que hace cuatro años estaba situado en el número dos de la candidatura sevillana. Por detrás de Guerra, figurará la actual consejera de Justicia de la Junta de Andalucía, Carmen Hermosín. La consejera socialista tendrá que abandonar su cargo antes de que finalice la actual legislatura en Andalucía.

ROMERO TAMBIEN LO DEJA La retirada de Felipe González coincide con la de su esposa, Carmen Romero, que también dejará su escaño en el Congreso. La diputada también será relevada por otro consejero andaluz, el de Gobernación, Alfonso Perales, que será cabeza de lista del PSOE por la provincia de Cádiz.

La jubilación política de González le llega a la edad de 61 años. El exlíder socialista es diputado desde las primeras elecciones democráticas de 1977 y entre 1982 y 1996 ocupó la presidencia del Gobierno. En el congreso de Suresnes de 1974 accedió a la secretaría general del partido, cargo que abandonó por sorpresa en el cónclave de junio de 1997. En el cargo le han sucedido Joaquín Almunia y José Luis Rodríguez Zapatero.

RETIRADA POLEMICA Las elecciones de 1996 fueron las últimas en que el expresidente del Gobierno concurrió como candidato a la Moncloa. En la última legislatura, en que obtuvo escaño por Sevilla, González, que preside en la actualidad la Fundación Progreso Global, ha pisado más bien poco el Congreso de los Diputados. Sus reiteradas ausencias han sido criticadas por el Partido Popular e incluso han generado cierto malestar en las propias filas socialistas.