Numerosos daños materiales fueron el balance del elevado número de incidentes protagonizados durante la madrugada de ayer por grupos reducidos de jóvenes radicales que actuaron casi de forma simultánea en distintos puntos de Euskadi.

Los alborotadores se cebaron en entidades bancarias de Portugalete, Vitoria y Ondarroa, donde varios cajeros resultaron incendiados. También atacaron sedes peneuvistas de Ondarroa, Sopuerta, Larrabetzu y Galdakao, y lanzaron cócteles incendiarios contra la oficina de Correos de Ondarroa. Varios encapuchados arrojaron también artefactos incendiarios contra una patrulla de la policía municipal de Bilbao.

La policía identificó a dos menores por participar en los destrozos en Abadiño (Vizcaya), pero no los detuvo. La TV vasca denunció que los radicales atacaron el sábado una unidad móvil en Portugalete, donde se enterró al preso Roberto Saiz.